La Reunión Secreta que Trajo de Vuelta a Bruce Dickinson y Adrian Smith a Iron Maiden

A finales de los años 90, Iron Maiden atravesaba una de las etapas más desafiantes de su carrera. La salida de Bruce Dickinson en 1993, tras el éxito del disco Fear of the Dark, marcó un cambio significativo en la banda. La llegada de Blaze Bayley como vocalista trajo consigo una etapa oscura y experimental, con discos como The X Factor y Virtual XI, que si bien fueron innovadores, no lograron conectar del todo con la esencia clásica y épica que definía a la banda.

Durante estos años, la popularidad de Iron Maiden sufrió un declive, llevándolos a actuar en mercados secundarios y terciarios, lejos de los grandes estadios que una vez llenaron en la década de los 80. La banda se encontraba en una encrucijada, y los fans sentían la ausencia de la voz inconfundible de Dickinson.

Mientras tanto, Bruce Dickinson había iniciado una carrera en solitario que, aunque llena de altibajos, lo llevó de vuelta al heavy metal clásico con los álbumes Accident of Birth (1997) y The Chemical Wedding (1998), donde se unió nuevamente con Adrian Smith, otro exmiembro esencial de Iron Maiden.

El manager de Iron Maiden, Rod Smallwood, consciente de la situación, comenzó a trabajar en una reconciliación entre Steve Harris y Bruce Dickinson en 1998. En una reunión secreta en la casa de Smallwood en Brighton, Inglaterra, se concretó lo que muchos fans esperaban: la vuelta de Dickinson a la banda. La reunión, que según algunos historiadores de la banda pudo haber tenido lugar el 29 de noviembre dse 1998, marcó un punto de inflexión en la historia de Iron Maiden. Según Nicko McBrain, quien recordó en una entrevista con Classic Rock en 2018: “Estaba en un bar de sake en Roppongi, Japón, con Rod y Janick. Y Rod me dijo que Adrian iba a volver con Bruce y que cuál era mi opinión”.

Bruce Dickinson y Steve Harris tuvieron una conversación franca, donde se abordaron los motivos de la salida de Dickinson y las razones para su regreso. Harris, aunque reticente al principio, terminó convencido por el entusiasmo y compromiso que Bruce mostraba. Una vez resuelta la vuelta de Dickinson, Harris contactó a Adrian Smith, quien aceptó regresar a la banda, completando así el renacimiento de Iron Maiden.

El despido de Blaze Bayley en enero de 1999 fue el último paso para el regreso de la formación clásica de Iron Maiden. Con Dickinson y Smith de vuelta, la banda lanzó el Ed Hunter Tour, una gira que no solo celebró su regreso, sino que también les permitió reconectar con su legado de los 80, tocando grandes clásicos que habían sido olvidados en la era de Bayley. La vuelta de Iron Maiden fue un éxito rotundo, revitalizando a la banda y devolviéndola a su posición como una de las más grandes fuerzas del heavy metal mundial.

Iron Maiden había regresado, más fuerte que nunca, demostrando que la magia de su música y su legado eran imperecederos. Como dijo Rod Smallwood: “Era importante que Bruce y Steve se sintiesen cómodos, sin sentirse observados por el mundo”. Y esa comodidad fue el catalizador que permitió que Iron Maiden volviera a la cima, donde siempre han pertenecido.

Escrito por: Rulo Ham el 04-09-2024