El día en que Ozzy Osbourne mordió la cabeza de un murciélago en pleno concierto: la historia detrás del infame incidente
¿Ozzy Osbourne comió un murciélago en pleno concierto? Sí, así es. La leyenda cuenta que el 20 de enero de 1982, durante un show en Des Moines, Iowa, Estados Unidos, un fanático arrojó un murciélago al escenario y el vocalista de Black Sabbath, en pleno apogeo de su problema con las drogas, pensado que era de juguete y no halló nada mejor que darle un mordisco a la cabeza.
Según su propia descripción, “mi boca se llenó de un líquido tibio y pegajoso, con el peor gusto que se pueda imaginar. Podía mancharlo mis dientes y correr por mi barbilla. Entonces, la cabeza del murciélago se sacudió y me pegó un buen mordisco. ‘Oh, joder’, pensé. ‘No me digas que me comí un maldito murciélago'”.
A pesar de lo bizarro de la historia, hay un trasfondo que nos lleva a preguntarnos qué llevó a un joven de Iowa de 17 años a pasar de contrabando un murciélago a la audiencia. Y más aún, ¿por qué Ozzy sintió que debería comerlo como refrigerio a mitad del concierto?
Los años 60, 70 y principios de los 80 fueron como el Lejano Oeste en el negocio de los conciertos, donde podía pasar cualquier cosa. En cuanto a Mark Neal, el fan que arrojó el murciélago, asegura que el animal estaba muerto cuando lo tiró al escenario y que vio a Ozzy levantarlo, morderle la cabeza y luego arrojarlo a la audiencia. Neal se espantó por lo sucedido y admitió sentir miedo después de lo ocurrido.
Esta historia ha pasado a la posteridad y forma parte del folclore del rock. Lo cierto es que Ozzy tuvo que ser llevado al hospital y pasar una semana recibiendo inyecciones para evitar una posible infección de rabia, y pagó entre 500 y 600 dólares en efectivo por la atención médica y la vacuna. La leyenda del príncipe de las tinieblas y el murciélago sigue viva y siempre será grabada como una de las anécdotas más extremas del mundo de la música.
Escrito por: Rulo Ham el 02-05-2023